viernes, 13 de enero de 2006

Testimonios

Estaba pensando acerca de algunas cosas que me pasaban, por qué sentía miedo en varias situaciones. Y pasó algo bueno de todo esto.


Llegue a la practica, y puse un CD para levantarme el ánimo, luego de estar pensando en la valentía y llegó el auxiliar de la sala, un caballero que la limpia y me dice “Que bonita la alabanza.” Es cristiano! Y me empezó a hablar. Al ratito llegó un compañero de trabajo y él siguió contando su testimonio, que a pesar de ser tranquilo, luego de casarse de dejo llevar por el trago y se ponía violento. Él, preocupado porque le estaba haciendo daño a su familia fue a una iglesia evangélica, una bautista, y luego de un tiempo (creo que fue cuando terminó la reunión), aceptó al Señor! Pero, buscó una iglesia pentecostal, y ahora esta allá. Es del tipo renovada, tipo canciones Marcos Witt y con jóvenes. Le llama mucho la atención la forma de la tradicional Iglesia Metodista Pentecostal de Chile.

En ese rato llegaron mis otras compañeras, una de ellas es compañera de curso, y, cuando contó su testimonio y el de otro caballero que es un viejito, jardinero que también es cristiano y que, luego de haber tenido cáncer a la próstata y le dieran dos meses de vida mas lleva dos años. No murió! Y está trabajando acá. Luego, me comento de su hijo que dio la prueba para entrar a la U y no pudo estudiar porque le faltó $$. Y se fue a trabajar al tiempo, lo nombraron diácono de su iglesia y ahora está estudiando teología para ser profesor cristiano.


Luego le conté mi testimonio de como llegué a la U.

2 comentarios:

Gustavo dijo...

El Señor tiene sus hijos por todas partes. Nunca para de sorprendernos con esto. Asi que ojo, con como nos portamos, y además... nunca nos sintamos solos. Hay un hermano en todas partes.
Que bonito tu post.

JamesRock7 dijo...

Tb me han pasado cosas así en la micro. Pero eso es algo que nunca conté.