viernes, 29 de diciembre de 2006

Tiempo Devocional

Oculto entre los rincones de la Oficina del GBUCh, estaba este tesoro.
Usado con permiso.

EL TIEMPO DEVOCIONAL

En un mundo tan agitado como el actual, donde todo corre de prisa, ¿habrá un tiempo para estar más a solas con Dios? Tristemente, muchos parecen estar tan ocupados que “no tienen tiempo” para el Señor. Muchos cristianos están tan ocupados en la obra de Dios que no tienen tiempo para Dios. Siempre mirando hacia abajo, sin dedicarse a mirar también para arriba. Una característica de nuestro siglo agitado es la vida a medias, sin paz, neurótica. Sin embargo, la Biblia nos enseña “buscad al Señor y vivirá vuestro corazón” (Salmo 69:32). Así pues, llegamos a entender la necesidad del tiempo devocional.


Pero, ¿qué queremos decir con un tiempo devocional? Es el encuentro regular entre un discípulo y el Señor Jesucristo por medio de la oración y la meditación de la Biblia. Por cierto, muchas veces al día podemos comunicarnos con El espontáneamente, pero el Tiempo Devocional (TD) es un período de tiempo que apartamos de antemano con el único propósito de encontrarnos personalmente con el Señor.

El TD tiene por lo menos tres partes:


1. Leer la Biblia: la finalidad principal no es el estudio, sino el Encuentro con Cristo por medio de la Palabra escrita.

2. Meditar en lo leído: de tal manera que la verdad bíblica comience a saturar nuestra mente, nuestras emociones y nuestra voluntad (Josué 1:8)

Josué 1:8

Recita siempre el libro de la ley y medita en él de día y de noche; cumple con cuidado todo lo que en él está escrito. Así prosperarás y tendrás éxito.


3. Orar a Dios: con alabanza, gratitud, confesión, petición e intercesión.


1) ¿Por qué es importante el Tiempo Devocional?

Hay por lo menos cuatro razones:

a. Porque al Señor le agrada el TD. Esta es una poderosa razón, suficiente en sí como motivación. Juan 4:23, Hebreos 13:15

Juan 4:23

Pero se acerca la hora, y ha llegado ya, en que los verdaderos adoradores rendirán culto al Padre en espíritu y en verdad,* porque así quiere el Padre que sean los que le adoren.

Hebreos 13:15

Así que ofrezcamos continuamente a Dios, por medio de Jesucristo, un sacrificio de alabanza, es decir, el fruto de los labios que confiesan su nombre.


Un indicio acerca de lo que pensamos acerca de Jesús es nuestra disposición para pasar tiempo a solas con El.

b. Porque yo recibo beneficios.


Salmos 42:1b-2

Cual ciervo jadeante en busca del agua,

así te busca, oh Dios, todo mi ser.

Tengo sed de Dios, del Dios de la vida.


Estos beneficios son varios:


(1) Información, ya que aprendo acerca de Cristo. Antes de poder obedecerle, necesito saber qué cosas me manda a hacer. Antes de poder comprender la vida, necesito saber qué cosas ha enseñado.


(2) Ánimo, ya que a veces me desanimo. No hay mejor fuente de inspiración que el mismo Señor Jesucristo.

(3) Poder, aún cuando sepa cómo ser y qué hacer, me falta la fuerza para ser esa clase de persona y hacer esa clase de obras.


(4) Gozo. Estar solo con alguien que me agrada produce gozo. Al pasar tiempo con Cristo, experimento un gozo tal que no se puede encontrar en ninguna parte más.


c. Porque en Cristo tenemos ejemplo. Su ejemplo señala la importancia de esta práctica.


Marcos 1:35

Muy de madrugada, cuando todavía estaba oscuro, Jesús se levantó, salió de la casa y se fue a un lugar solitario, donde se puso a orar.


Lucas 5:16

Él, por su parte, solía retirarse a lugares solitarios para orar.



Mateo 14:23

Después de despedir a la gente, subió a la montaña para orar a solas. Al anochecer, estaba allí él solo.


d. Porque tenemos evidencia en cristianos maduros. La mayoría de los que van creciendo hacia la madurez en Cristo son personas que se han comprometido con la disciplina del TD. Piensa en los cristianos maduros a quienes tú respetas por sus frutos (entendidos en el sentido de Gálatas 5:22-23) y verás que la mayoría se encuentra con Cristo regularmente. La cuestión básica es esta: ¿seremos cristianos mediocres o cristianos que crecen? Un factor importante que influirá en nuestra respuesta es nuestra disposición a desarrollar la disciplina del TD.


2) ¿Cómo comenzar?


Una vez que alguien desee sinceramente comprometerse con un TD, ¿qué puede hacer para comenzar?


a. Orar, pedir que el Espíritu Santo te siga dando el deseo y el poder.


Filipenses 2:13

Pues Dios es quien produce en ustedes tanto el querer como el hacer para que se cumpla su buena voluntad.


b. Recordar el principio de la autodiscplina: “hacer lo que debes hacer en el momento debido, de la manera debida, en el lugar debido y por las razones correctas”. En otras palabras, la autodiscipina es el uso sabio de tus recursos personales (tiempo y energía).


c. Apartar un tiempo para el TD de antemano. ¿Cuándo? A la hora del día cuando uno esté más alerta. Para algunos es antes de tomar desayuno. Para oros inmediatamente después de tomarlo y para otros es otra hora del día o de la noche. ¿Cuánto tiempo? Varía de persona en persona. Generalmente es unos 20 a 30 minutos. Lo ideal es tener un tiempo fijo.


d. Planear con anticipación. Acuéstate a buena hora para poder amanecer descansado para el TD. Muchas veces la batalla del TD se pierde la noche anterior.


e. Hacer del TD un tiempo tranquilo


Salmos 46:10

«Quédense quietos, reconozcan que yo soy Dios.

¡Yo seré exaltado entre las naciones!

¡Yo seré enaltecido en la tierra!»


f. Elegir un lugar conveniente para poder estar concentrado y sin distracciones. Puede ser al aire libre.


g. Orar al comienzo. Pide que el Espíritu Santo controle tu uso de ese tiempo y dirija tu lectura, meditación y oración


h. Introducirse en la Biblia. Abre tu mente y tu corazón a la Escritura. Puedes usar un devocionario cristiano. Evita leer pasajes al azar. Prefiere seguir un método sistemático. Ver abajo.


i. Tener un cuaderno a la mano. Anota las ideas que quieras recordar, preguntas sin respuesta, etc.


j. Compartir con un amigo. Dile que estás tratando de cultivar el TD. Las decisiones solitarias se rompen fácilmente. Pide oración.


k. Puedes usar también uno o varios calendarios de oración y mantenerlos junto con tu cuaderno de apuntes. Durante el día, si te recuerdas de motivos de oración, anótalos en cualquier papel y lo pones junto a tu calendario.


l. Ahora quiero sugerir al lector que haga una PAUSA ahora mismo y decida, si ya no lo ha hecho, si está dispuesto a comenzar con el hermoso hábito del TD y a qué hora, comenzando mañana mismo.


3) Cuando surjan problemas.


(1) “Sé que debiera hacerlo, pero no quiero. Quisiera desearlo, pero debo confesar que no es así.


REMEDIO: Pide al Señor que coloque en ti el deseo. Nadie más puede motivarte. Ni siquiera tu mismo. Recuerda Filipenses 2:13


(2) “Hoy no tengo ganas”.


REMEDIO: Hazlo de todos modos, reconociendo delante de Cristo que no lo quieres hacer, pero que crees que vale la pena. Dile que te cambie los sentimientos. Averigua por qué te sientes así.


(3) “Mi mente se distrae”.


REMEDIO: Pide al Señor que te de fuerzas para concentrar tu atención en Cristo y en Su Palabra. Luego aplica tu poder de autodisciplina para conducir tu mente.


Romanos 8:5-8


Los que viven conforme a la naturaleza pecaminosa fijan la mente en los deseos de tal naturaleza; en cambio, los que viven conforme al Espíritu fijan la mente en los deseos del Espíritu.

La mentalidad pecaminosa es muerte, mientras que la mentalidad que proviene del Espíritu es vida y paz.

La mentalidad pecaminosa es enemiga de Dios, pues no se somete a la ley de Dios, ni es capaz de hacerlo.

Los que viven según la naturaleza pecaminosa no pueden agradar a Dios.


(4) “Pierdo muchas veces la oportunidad de tener el TD”


REMEDIO: Pide al Señor que fortalezca tu deseo y te dé el poder para disciplinar tu uso del tiempo. Disciplínate a ti mismo.


(5) “El TD me resulta una carga”


REMEDIO: Pide al Señor que te devuelva el gozo del Señor en este TD entre tú y El. Varía tus costumbres, canta un himno o usa otro método de estudio bíblico.


Hay tres razones principales por qué nos resulta difícil esta disciplina:


1) Por la influencia de la “carne”. Recuerda que tu naturaleza vieja se opone a toda disciplina de agrade a Cristo.


2) Por la vieja resistencia de parte de Satanás. El diablo se va a oponer a todo esfuerzo tuyo para agradar a Cristo. Su estrategia consiste en robarte el gozo del TD, complicando tu horario, mantenerte en pie hasta tarde en la noche, dándote sueño durante el TD o haciendo que tu mente se distraiga. Pide que el Espíritu Santo en ti frustre los propósitos del diablo.


3) Por la influencia del mundo, culturalmente estamos bajo hábitos de indisciplina, irresponsabilidad y libertinaje. No te conformes a este mundo y sé un fiel discípulo.


Santiago 4:4


¡Oh gente adúltera! ¿No saben que la amistad con el mundo es enemistad con Dios? Si alguien quiere ser amigo del mundo se vuelve enemigo de Dios.


4) ¡Hazlo ahora!


Planifica ahora tu TD del día de mañana y de cada día en adelante. Quítale al diablo el placer de vencerte. Sin duda vas a perder tu TD varias veces, pero sólo podrás cultivar ese hábito espiritual con provecho con repetidos comienzos. De hecho, algunos cristianos demoran mucho en madurar hasta el punto de formar el hábito hermoso del TD. Para algunos es una lucha que dura toda la vida. En todo caso, nunca te des por definitivamente derrotado. Nunca abandones la lucha.


Con la ayuda de Dios hazte el ánimo de que vas a ir creciendo como un discípulo comprometido que se encuentra con Cristo regularmente en un significativo TD.


A fin de cuentas, como en 2° Samuel 14:28, ¿qué nos aprovecha vivir en Jerusalén si no vemos el rostro del Rey?


Adap. Josué Fonseca.

1 comentario:

Guille dijo...

Bueno, gracias James!!!

;)

DTB!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!