sábado, 3 de enero de 2015

¿Cómo madurar realmente en la fe?

[2Pe 1:3-11] NVI* %v 3% Su divino poder, al darnos el conocimiento de aquel que nos llamó por su propia gloria y potencia, nos ha concedido todas las cosas que necesitamos para vivir como Dios manda.%v 4% Así Dios nos ha entregado sus preciosas y magníficas promesas para que ustedes, luego de escapar de la corrupción que hay en el mundo debido a los malos deseos, lleguen a tener parte en la naturaleza divina.[b] %v

5% Precisamente por eso, esfuércense por añadir a su fe, virtud; a su virtud, entendimiento; %v 6% al entendimiento, dominio propio; al dominio propio, constancia; a la constancia, devoción a Dios; %v 7% a la devoción a Dios, afecto fraternal; y al afecto fraternal, amor. %v 8% Porque estas cualidades, si abundan en ustedes, les harán crecer en el conocimiento de nuestro Señor Jesucristo, y evitarán que sean inútiles e improductivos. %v 9% En cambio, el que no las tiene es tan corto de vista que ya ni ve, y se olvida de que ha sido limpiado de sus antiguos pecados. %v 10% Por lo tanto, hermanos, esfuércense más todavía por asegurarse del llamado de Dios, que fue quien los eligió. Si hacen estas cosas, no caerán jamás, %v 11% y se les abrirán de par en par las puertas del reino eterno de nuestro Señor y Salvador Jesucristo.





Alimento para el Alma 2015

jueves, 1 de enero de 2015

Un Salmo para comenzar este 2015

[Salmo 40:1-11]] NVI - Nueva Versión Internacional.

Puse en el SEÑOR toda mi esperanza; él se inclinó hacia mí y escuchó mi clamor.

2 Me sacó de la fosa de la muerte, del lodo y del pantano; puso mis pies sobre una roca, y me plantó en terreno firme.

3 Puso en mis labios un cántico nuevo, un himno de alabanza a nuestro Dios. Al ver esto, muchos tuvieron miedo y pusieron su confianza en el SEÑOR.

4 Dichoso el que pone su confianza en el SEÑOR y no recurre a los idólatras ni a los que adoran dioses falsos.

5 Muchas son, SEÑOR mi Dios, las maravillas que tú has hecho. No es posible enumerar tus bondades en favor nuestro. Si quisiera anunciarlas y proclamarlas, serían más de lo que puedo contar.

6 A ti no te complacen sacrificios ni ofrendas, pero me has hecho obediente; tú no has pedido holocaustos ni sacrificios por el pecado.

7 Por eso dije: «Aquí me tienes —como el libro dice de mí—.

8 Me agrada, Dios mío, hacer tu voluntad; tu ley la llevo dentro de mí.»

9 En medio de la gran asamblea he dado a conocer tu justicia. Tú bien sabes, SEÑOR, que no he sellado mis labios.

10 No escondo tu justicia en mi corazón, sino que proclamo tu fidelidad y tu salvación. No oculto en la gran asamblea tu gran amor y tu verdad.

11 No me niegues, SEÑOR, tu misericordia; que siempre me protejan tu amor y tu verdad.